Vitoria-Gasteiz, 20 de junio de 2025. El Parlamento Vasco ha aprobado una Proposición no de Ley en la que se reconoce el papel fundamental del cooperativismo vasco como motor para construir un modelo económico más democrático, sostenible y
arraigado en el territorio.
El texto fue aprobado en el Pleno celebrado ayer con el apoyo de todos los grupos parlamentarios, excepto Vox, y pone de manifiesto el amplio consenso político existente en Euskadi en torno al valor estratégico del cooperativismo. La iniciativa subraya el potencial del modelo cooperativo para responder a los grandes desafíos globales, como la generación de empleo digno, la cohesión social y el fortalecimiento de comunidades empresariales resilientes e inclusivas.
Este reconocimiento institucional llega en un año especialmente significativo: el Año Internacional de las Cooperativas (AIC2025), declarado por la Asamblea General de las Naciones Unidas bajo el lema “Las cooperativas construyen un mundo mejor”.
Compromiso con el desarrollo económico y social
La proposición aprobada insta al Gobierno Vasco a:
- Reconocer a las cooperativas como agentes clave en el diálogo institucional y social.
- Impulsar el emprendimiento colectivo y el tejido industrial cooperativo.
- Desarrollar una estrategia alineada con las recomendaciones europeas sobre economía social.
- Colaborar estrechamente con el Consejo Superior de Cooperativas de Euskadi y KONFEKOOP en iniciativas estratégicas conjuntas.
En un contexto de profundas transformaciones estructurales y crisis globales, el Parlamento Vasco subraya la aportación constante del cooperativismo vasco a la economía del país. Desde 2021, el empleo generado por las cooperativas ha crecido un 9%, alcanzando los 61.000 empleos directos, lo que supone más del 10% del PIB industrial.
Además, se destaca la importancia de visibilizar con mayor precisión el impacto del cooperativismo en los programas estadísticos del Gobierno Vasco.
Un modelo de éxito con futuro
Desde KONFEKOOP y el Consejo Superior de Cooperativas de Euskadi, se valora muy positivamente el contenido del acuerdo, que reconoce tanto los avances recientes del modelo cooperativo como su papel estratégico para los próximos años.
El cooperativismo vasco es, una vez más, reconocido como un modelo empresarial sólido, de éxito probado, con capacidad para afrontar los grandes retos económicos y sociales del siglo XXI.